Qué es:
La leptospirosis en perros es una enfermedad causada por una bacteria llamada Leptospira, la cual ocasiona el surgimiento de síntomas como fiebre, escalofríos y debilidad muscular y cuya gravedad dependerá de la edad y de la respuesta del sistema inmunológico de su mascota.
Los perros pueden contraer esta enfermedad si entran en contacto directo con agua, suelos u otras fuentes contaminadas por esta bacteria, pues esta puede sobrevivir durante varios meses en estos sitios, siendo más frecuente que los brotes surjan en épocas de fuertes lluvias e inundaciones.
El período de incubación desde que la bacteria entra al organismo de su mascota hasta el desarrollo de signos clínicos, como fiebre, letargo e inapetencia, es de aproximadamente 7 días, debiendo siempre consultar al veterinario lo más pronto posible para que realice una evaluación e indique el tratamiento más adecuado.

Principales síntomas
La leptospirosis puede llegar a ser asintomática en algunos perros, no obstante, algunos pueden desarrollar síntomas, que incluyen:
- Fiebre;
- Escalofríos;
- Debilidad muscular;
- Postración;
- Sed;
- Cambios en la frecuencia y en la cantidad de orina;
- Vómitos;
- Diarreas;
- Pérdida del apetito;
- Letargia.
En los casos más graves, el perro puede presentar coloración amarilla de la piel, mucosa y de la parte blanca del ojo, inflamación dolorosa de los ojos y/o insuficiencia renal acompañada o no de insuficiencia hepática.
Raramente, también podrían desarrollar una enfermedad pulmonar grave, que se evidencia por la dificultad respiratoria y un aumento de la frecuencia respiratoria.
Asimismo, podría causar trastornos hemorrágicos, ocasionando el surgimiento de sangre en las heces, en la orina o en la saliva, así como hemorragias nasales. También podrían presentarse puntos rojos en las encías y otras membranas mucosas o de color claro y acumulación de líquido en las piernas o en el tórax.
Cómo se contagia la leptospirosis
La leptospirosis en perros puede contagiarse a través del contacto directo de las membranas mucosas o de una herida en la piel con orina, suelo, comida, agua o camas contaminadas con la bacteria; por la mordedura de un animal infectado; al comer tejidos o un cadáver infectado y a través de la placenta de la madre a los cachorros.
Cómo es el tratamiento
La leptospirosis generalmente es tratada por antibióticos que deben ser recetados por el veterinario, por lo general es indicada la doxiciclina o penicilina. No obstante, dependiendo de la gravedad, el perro podría necesitar pueden requerir líquidos por vía intravenosa y/o apoyo nutricional.
En casos extremos, también podría requerir oxigenoterapia, ventilación mecánica, diálisis renal u otras medidas necesarias de cuidados intensivos.
Otras dudas comunes
Algunas dudas comunes sobre la leptospirosis son:
1. ¿La leptospirosis tiene cura?
Cuando se trata temprano y agresivamente, las posibilidades de recuperación son buenas, sin embargo, puede haber riesgo de daño renal o hepático residual permanente.
2. ¿Cómo se puede prevenir?
La leptospirosis se puede prevenir a través de la vacunación, pues protege a los perros durante al menos 12 meses. Además, también se debe minimizar la exposición de su perro a posibles fuentes de la bacteria Leptospira.
Para disminuir el riesgo de infección se deben adoptar algunas estrategias, que incluyen:
- Evitar que el perro beba agua de ríos, lagos o arroyos;
- Dejarlo sin supervisión en áreas rurales;
- Evitar el contacto con roedores o controlar la plaga, en caso exista.
Además de esto, también se debe tener cuidado al acudir a otros lugares con perros, como parques u hoteles para perro, por ejemplo, debiendo en estos casos estar debidamente vacunado.
3. ¿Puede contagiarse a los humanos?
Sí, esta es una enfermedad zoonótica, es decir, puede ser transmitida de los perros a los humanos cuando estos entran en contacto con la orina de animales infectados por esta bacteria.